Research Story no es un título de simulación de granjas ni simulación social al uso, aunque mezcla ambas mecánicas. Con una estética parecida a la de los juegos antiguos de 8 bits, pero colorido y cuqui, el título parecía justo lo que busco en este género. Desarrollado por PetalCatGames y editado por ellos mismos además de Electronic Sheep Games, Research Story se encuentra actualmente en acceso anticipado en la plataforma Steam. El juego se encuentra totalmente en inglés, aunque es bastante intuitivo gracias a la ayuda del diario y sus dibujos.
Bienvenidos al Archivo Violeta
Como ya es habitual en este tipo de títulos, Research Story comienza con la llegada de una carta que nos da la bienvenida como investigadores al pueblo de Shimmerbrook. Debido a un pico de actividad inusual en la zona, se están detectando mucha fauna, flora y verduras nuevas y desconocidas, por lo que se necesita un investigador en la zona. Una vez lleguemos al pueblo, Vallee, la archivista jefe del Archivo Violeta, nos explicará todo lo necesario como nuestra mentora. Al contrario que en otros casos, aquí nos encontramos en un mundo de fantasía donde tendremos vecinos insuales, como orcos o pájaros que hablan, lo cual me ha encantado.

El juego no parece poseer tal cual una historia lineal y con un final sólido (ya que en todas las horas que he jugado no he encontrado un final al uso), como podría ser el caso de Wylde Flowers, si no que opta por una narrativa estilo Stardew Valley. Existen misiones que nos van dando distintos personajes, como resolver los distintos puzles que nos iremos encontrando, pero todo esto es más bien una excusa que da paso a la jugabilidad. Además de nuestros compañeros investigadores, cada uno se especializa en un campo distinto, tendremos los típicos vecinos que llevarán la taberna, la herrería o la tienda.
El diario: toque distintivo del título
Como investigadores, nuestra función principal es identificar las distintas plantas y animales que rodean al pueblo. Nuestro diario será nuestro mejor aliado gracias a sus dibujos y descripciones. Cuando encontremos un nuevo bichito y éste nos deje algo de material, como pelo o plumas, podremos elegir si queremos iniciar una investigación sobre ellos. Sin embargo, el tener solo unas pocas ranuras (luego podremos ampliarlas) al inicio nos obliga a ir completando investigaciones poco a poco.

En el caso de las plantas y verduras, normalmente deberemos observar un par de veces la misma planta antes de desbloquear sus semillas, y una vez las tengamos, necesitaremos cultivarlas para completar la investigación. Para añadir un toque de picante a esta mecánica tan habitual en la simulación de granjas, Research Story nos introduce otro tipo de elementos, como lámparas solares o pérgolas. Habrá ciertas plantas que solo crecerán a la sombra, mientras que otras necesitarán lámparas solares para evitar marchitarse en los días de lluvia.
Por otro lado, tenemos los animales. Aunque son igual de protagonistas que las plantas, son mis favoritos. Podremos encontrar distintas especies dependiendo de si es de día o de noche, desde cosas tan mundanas como patos, hasta pequeñas setas moteadas. Para ganarnos su confianza, deberemos alimentarlos con su comida favorita, y en ese momento será cuando podremos domesticarlos y darles un hogar.

Al igual que ocurre con la flora, y para distinguirlos del típico juego de granjas, los animales tienen distintos rasgos, que además son independientes de sus ventajas. Por ejemplo, puedes domesticar una gallina y un conejo, y que ambos tengan el rasgo Social (que los hará subir más rápido el nivel de amistad si comparten espacio con otro animal), pero la ventaja la determina el tipo de animal. En el caso de las gallinas, te ayudarán a encontrar más semillas de plantas, mientras que los conejitos nos ayudarán a hacer crecer malas hierbas cuando reguemos nuestras plantaciones.
Líneas generales
Como es habitual en el género, Research Story posee cuatro estaciones, durante las cuales podremos encontrar plantas y animales distintos. Las estaciones son independientes del avance de las distintas misiones (de hecho, yo me quedé con una misión de primavera colgada porque no pude pescar un pez a tiempo), por lo que esto hace que el juego tenga una duración indefinida, incluso estando en acceso anticipado. Una vez vayamos completando investigaciones, podremos llevarlas al Archivo Violeta para conseguir nuestra recompensar y subir nuestro rango de investigador. La música está muy bien llevada y acompaña realmente bien, y el estilo visual del arte de los distintos personajes es simplemente bellísimo.

Sin embargo, también encontramos ciertas cosas negativas. El mapa no es excesivamente grande, por lo que se puede volver repetitivo a las pocas horas de juego. Además, el hecho de poseer únicamente 55 puntos de energía es algo que capa mucho la experiencia, ya que se vuelve frustrante el no poder hacer casi nada sin agotarte. Sí, existen pociones y comida, pero cuando tienes una gran prole de amigos peludos que alimentar, se vuelve complicado sobrellevar todo lo que el título pone en la mesa. Las interacciones sociales, por el momento, son algo escasas, aunque el juego te permite tener romances con distintos lugareños.
Primeras impresiones
Research Story es un título que, sin duda, consigue ese golpe de originalidad gracias a sus mecánicas distintivas y su toque retro visual. Ser investigadores y tener que aprender y anotar todo sobre nuevas especies es un soplo de aire fresco a la simulación de granjas habitual, y ha conseguido tenerme enganchada a la pantalla durante muchas horas seguidas. Sin embargo, también tiene sus peros, como la poca energía que tienes, un mapa no tan grande o el hecho de que algunas tareas se pueden volver repetitivas.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que sigue siendo un título en acceso anticipado, por lo que podremos esperar mucho más de él cuando esté completo.