Las batallas de robots es un tema que se suele usar mucho en películas y, aunque a veces también se ve en los videojuegos, es algo menos común, y Override 2: Super Mech League viene para cambiar eso.
La lucha es uno de mis géneros favoritos dentro de los videojuegos, amo meterme en partidas multijugador para batirme en duelo contra otros jugadores de alrededor del globo, por eso este juego es perfecto para mi. A continuación veremos Override 2: Super Mech League parece que está en la buena senda, o tiene muchas cosas que pulir de cara a su lanzamiento oficial.
El combate
Sin duda, el combate es lo más importante en un juego de este género, debido principalmente a que estos juegos se basan completamente en su jugabilidad. En este apartado cumple, trayendo un sistema de combate complejo, con diversas opciones para el jugador, y a la vez sencillo para aquellos neófitos en el género.
Override 2: Super Mech League utiliza los gatillos para ejecutar los ataques, algo poco común en el género, pero que ayuda a introducir combos diferentes, debido a la variedad de ataques disponibles. El problema viene en como se entrelazan estos combos.
El combate resulta bastante variado gracias a sus diversos escenarios y mechas
En la beta, resultaba imposible entrelazar combos, debido a que parece que muchos de los ataques están pensados para ser únicos, es decir, que no se continúe con otro golpe diferente, por lo que incentiva el machaqueo del mismo botón para derrotar al enemigo.
El combate está bien, pero hay una cosa que tira por los suelos todo lo que el combate hace bien, y es la cámara. Sinceramente hacía mucho tiempo que no me topaba con una cámara tan mala, de esas que te desesperas hasta tal punto que necesitas dejar el juego o te dará una torticolis en el cuello de intentar ver qué está pasando en pantalla. Esta cámara es caótica, poco responsiva y además hace una especie de fijado automático a los enemigos que no funciona nada bien en la mayoría de los casos; las únicas ocasiones en las que funciona bien es en los combates uno contra uno, y esto solo ocurre cuando entras en el modo entrenamiento.

Una propuesta variada
Debido a que es una beta, claramente no está todo lo que incluirá el juego final. Sin embargo, sí se ha podido apreciar que habrá gran variedad de personajes a elegir, y sorprendentemente cada uno se siente diferente al anterior. Digo sorprendentemente porque en muchos juegos de lucha hay gran cantidad de personajes, pero muchos de ellos se sienten iguales, lo que afea bastante la experiencia.
Los ataques son completamente diferentes en cada personaje, lo que incentiva a probar todos y cada uno de los mechas disponibles, para así poder encontrar el que mejor se adecúa a ti. Esta variedad incluye ataques cuerpo a cuerpo, a distancia, movimientos de defensa, e incluyo movimiento desestabilizadores.
Unos mapas muy imaginativos
La calidad de los mapas que tiene un título de lucha también es determinante para la valoración final de este, y en este caso me he sorprendido con los mapas que venían en la beta. Mapas muy variados y que se van moviendo para que en cada momento tengas que readaptarte al estado del mismo a medida que avance su destrucción.

Además de esto, es destacable que cada mapa tiene un especie de trampa que hace daño a todos los personajes que tenga a su alcance, lo que a pesar de ser una idea interesante, creo que frena el ritmo de los combates.
Un aparto técnico por mejorar
Está claro que al tratarse de una beta no iba a tener el apartado técnico más impecable, pero esperaba que al menos fuera jugable; por desgracia, por lo menos en la versión de PlayStation 4 tiene mucho que mejorar, y esperemos que lo hagan de cara a su lanzamiento.
El problema más grave que tiene Override 2: Super Mech League es su tasa de frames, que se mantiene estable en todos los modos, menos en el más importante: el modo enfrentamiento, en el que se puede probar el combate contra varios robots, y en este caso bajan los frames de manera drástica, convirtiendo una experiencia de combate satisfactoria en un dolor de muelas.

Estas bajadas no eran exclusivas del modo online, esto también ocurrían en las partidas contra bots; sin embargo me sorprendió que en el modo entrenamiento iba de maravilla, totalmente fluido y sin ningún problema. Esto me lleva a pensar que el modo de pelea de cuatro robots no está bien optimizado, y si es así podemos tener esperanza porque es fácilmente arreglable.
Además de esto me he encontrado diversos errores, como texturas que no cargaban ni a tiros, o varios cuelgues, tanto en el menú principal como dentro de una partida.
Conclusión
Es cierto que esta beta presenta unos pocos fallos, pero estos fallos afean completamente la experiencia; esperemos que estén solucionados el día de su lanzamiento, porque de esta manera podríamos estar ante uno de los mejores juegos de lucha en mucho tiempo.
En resumen esta beta nos ha dejado ver que Override 2: Super Mech League tiene muy buenas ideas, y que algunas de ellas las implementa muy bien, pero que tiene todavía mucho que pulir de cara a su lanzamiento, empezando por el apartado técnico en PlayStation 4, que en esencia solo necesita una buena optimización, y la cámara que es totalmente indomable, y que al igual que el apartado técnico es fácilmente solucionable de cara al lanzamiento del juego.