Aunque siempre me han encantado los juegos de lucha, no fue hasta el fantástico Dragon Ball FighterZ que me motivé para ir un poco más allá de machacar botones; me hizo aprender viendo jugadas de otros luchadores, ver tutoriales, e incluso visitar la sala de entrenamiento, algo que jamás había hecho antes. Otro de los juegos de Arc System Works, Under Night In-Birth Exe:Late[cl-r], también me enganchó bastante cuando lo analicé en su momento gracias a lo accesible que era, pero no he seguido jugando de forma continua. Sin embargo aún a día de hoy, siendo terriblemente manco (aunque con Broly a algún personaje te destrozo), sigo jugando un rato todas las semanas a Dragon Ball FighterZ para no perder lo que he ganado y porque lo disfruto muchísimo.
En su momento intenté lanzarme a Guilty Gear Xrd por lo bonito que era a nivel visual, pero se me hacía terriblemente complejo. Con el bagaje que traía del título de Goku y compañía, se me hacía muy atractivo probar este nuevo Guilty Gear Strive con una mayor comprensión del género. Y, efectivamente, ha sido una auténtica gozada.
Let’s rollback!
He podido jugar varios días a la beta de Guilty Gear Strive; empezó con muchos problemas, pero desde Arc System Works se han portado, y extendieron la beta un par de días más para compensar el tiempo perdido algo muy de agradecer. Además, en la beta podíamos observar los modos que tendríamos disponibles para el lanzamiento (Arcade e Historia incluidos), aunque solo podíamos jugar en el modo entrenamiento, en local (incluso contra otro jugador) y online.
Vais a tener que disculparme si no me expreso con un léxico propio de pro-players del fighting, pero aún es algo que me queda grande. Guilty Gear Strive es la nueva entrega de una de las sagas más reconocidas de la lucha en 2D; desarrollado por Arc System Works, el título ofrece espectaculares y frenéticos combates de uno contra uno controlando a luchadores muy particulares y diferenciados entre sí.

Guilty Gear Strive se ha mostrado con mucha fluidez en esta beta, además de accesible pero repleto de posibilidades
Lo primero que quiero destacar, porque es una de las principales novedades del juego (y una que le va a ayudar a tener mucha más proyección a nivel internacional), es lo fluido que ha ido el modo online. Es cierto que mi conexión no es mala, pero tampoco es una maravilla; en el Dragon Ball FighterZ suelo jugar sin demasiado problema, aunque no siempre. Sin embargo, para estar hablando de una beta, ha funcionado a las mil maravillas, aunque se ha notado mucho la ausencia de botón rematch, algo que espero que esté presente en la versión final del juego.
Además, se ha reportado de forma bastante generalizada que este nuevo sistema ha permitido combates con mucha fluidez entre diferentes regiones, algo que sin duda beneficiará mucho al juego a nivel competitivo y para mantener vivo el online; esto es gracias a la implementación del rollback netcode, que a buen seguro va a dar muchas alegrías a los más enfocados en la faceta online del juego.
Una jugabilidad con muchas posibilidades
En esta beta hemos podido jugar sin limitaciones con 13 de los 15 personajes que el juego tendrá de base, habiéndose confirmado el último componente del roster hace muy poco. Guilty Gear Strive ofrece una simplificación de lo visto en Guilty Gear Xrd, pero contando con el retorno del Roman Cancel, una mecánica que ofrece una gran variedad de posibilidades según la situación en la que lo utilicemos; nos abre varias posibilidades para enlazar diferentes combos a costa de nuestra barra de tensión, llegando incluso a congelar durante unos instantes al rival en el aire.
Por otra parte, Guilty Gear Strive mantiene su esquema de cinco botones sin combos automáticos, a diferencia de Dragon Ball FighterZ, pero con relativa facilidad para realizar movimientos especiales y combos. Cada personaje cuenta con un tipo de combate muy diferente, que viene dado por la propia caracterización del mismo. Por ejemplo, Giovanna (uno de los nuevos personajes) realiza combos de patadas ayudándose de una especie de espíritu perruno, y me atrevería a decir que no hay un personaje que se sienta más ágil que ella cuando consigue enlazar combos de patadas; totalmente diferente es el estilo de mi main, Ramlethal, una señora con dos espadas gigantes a los lados que maneja de forma individual. Siempre es algo que se nota mucho en los juegos de Arc System Works, pero la labor de diseño presente en los Guilty Gear hace incluso más evidente lo diferenciados que están los personajes, siendo todo un gusto descubrirlos y sentir cómo pelean para ver cuales se adaptan a nuestro estilo.

También podremos arrinconar al rival en la esquina, quedando suspendido durante unos momentos en el aire para darnos tiempo de rematarlo y mandarlo volando a otra sección del escenario. Unido a la gama de bloqueos, agarres, combos aéreos e incluso transformaciones con las que contamos, las contiendas son realmente variadas. Me ha encantado la sensación de que, con cada luchador que enfrentaba, sabía que el combate se iba a desarrollar de forma diferente; el personaje rival determina las estrategias a utilizar y el tipo de combate que tendrás, algo que, insisto, suele pasar en el género, pero es una sensación que este Guilty Gear Strive ha transmitido muy bien en esta beta.
Es pronto para decirlo, pero durante las horas que he disfrutado del juego sí que he sentido un mayor equilibrio entre jugabilidad accesible, pero llena de posibilidades, que en otros juegos del estudio. También me ha parecido notar que cada combo y counter hacen una gran cantidad de daño, siendo combates muy cortos y que castigan mucho los errores, algo que a mí personalmente me encanta. Ante esta perspectiva, en la que incluso yo he podido ganar bastantes combates en el online durante estos días, espero que en la versión final del juego implementen un tutorial más completo que el que hay en la beta para que más gente se anime a probarlo.

Para rematar la propuesta, su apartado técnico luce espectacular, con una banda sonora muy engorilante de la que estoy deseando poder escuchar el resto de temas; incluso los añadidos más estridentes, como ese indicador gigante del número de golpes, quedan muy bien en el conjunto final, dando un producto con una personalidad tremenda, muy atractivo a nivel visual. Los nuevos personajes lucen magníficos, y son realmente diferentes y divertidos de utilizar.
En este tipo de propuestas su éxito comercial es incluso más importante que en otras, ya que es necesario de cara a llenar las salas del online y que el juego se mantenga vivo, pero Guilty Gear Strive apunta muy alto para convertirse en uno de los reyes del fighting moderno.