Si hay una tercera parte tan esperada por los fans de Valve como Half-Life 3, esa es la continuación de Left 4 Dead 2, uno de los mejores shooters cooperativos de todos los tiempos. Durante estos años, el juego que más ha intentado replicar esa experiencia es el notable World War Z, pero sin llegar a las cotas de calidad que disfrutamos en esta joya del pasado. por eso, la llegada de este Back 4 Blood es tan importante.
Un título que parece venir a recuperar, con un nombre y una piel diferentes, ese trono que jamás le ha sido arrebatado. Os contamos qué tal nuestras primeras horas con la beta anticipada del juego. Nuestros agradecimientos a Warner Bros. Games por cedernos claves para poder probarlo tanto en PS4/PS5 como en PC.
La importancia del trabajo en equipo
Resumiendo mucho, Back 4 Blood es un shooter en primera persona centrado en el multijugador, con opciones cooperativas y competitivas, pero con su principal foco en el primer tipo. El núcleo del juego es su campaña, una serie de niveles que debemos superar formando una escuadra de cuatro exterminadores. La colaboración entre todos los componentes del equipo será crucial para superar las horas de cientos de zombis que nos atacarán a lo largo de sus variados escenarios. No solo habrá zombis tradicionales, sino también especiales, con diferentes tamaños y habilidades, que pondrán en jaque nuestras estrategias y formaciones. Podrán atraparnos y estrangularnos, inmovilizarnos o envenenarnos, entre otras, por lo que será fundamental que haya un compañero cerca para golpearle o dispararle como única opción para liberarnos; como os podéis imaginar, si decidimos ir por nuestra cuenta, estamos perdidos.
Back 4 Blood añade bastantes novedades a la fórmula que enriquecen mucho la experiencia, a la vez que lo hacen sentirse un juego más actual
La cooperación, el trabajo en equipo y la organización siempre han sido claves en Left 4 Dead, y me alegra mucho decir que el espíritu de esta mítica saga se mantiene intacto en Back 4 Blood. Su gunplay, excelente diseño de niveles, variedad en objetivos y de enemigos… es un digno sucesor espiritual de la serie, y tiene mimbres para convertirse, por méritos propios, en uno de los mejores shooters multijugador del mercado. Gran parte del mérito consiste en replicar las sensaciones de Left 4 Dead, pero añade bastantes novedades que enriquecen mucho la experiencia, a la vez que lo hacen sentirse un juego más actual.
Ahora contamos con un sistema de cartas que nos dan unas bonificaciones pasivas, tanto individuales como al equipo. Podremos configurar nuestro propio mazo para los niveles. Al principio de cada fase podremos elegir algunas de esas cartas, pero también podremos encontrar nuevas repartidas por los niveles o incluso sufrirlas por parte de los escenarios en forma de modificadores. Por ejemplo, puede tocar una carta al principio de la fase en la que diga que el nivel estará cubierto de una densa niebla, que los enemigos serán más resistentes en cualquier lugar que no sea la cabeza o incluso proponernos objetivos secundarios con jugosas recompensas económicas si los cumplimos. Aunque al principio choca mucho, son un elemento que añade nuevas capas a la colaboración entre los miembros del equipo y variabilidad a la hora de enfrentar las diferentes fases cuando las repitamos.
Un diamante en bruto
También podremos encontrar numerosos modificadores para las armas repartidos por los niveles e incluso reabastecernos antes de salir del refugio inicial con el dinero que hayamos ganado. Hay muchos tipos nuevos de enemigos especiales, incluyendo gigantescas criaturas que funcionan a modo de jefe final, con barra de vida y todo. Por supuesto, también hay cosas que ajustar de cara a la versión final. Hay cartas que están totalmente desbalanceadas, como la de recuperar vida a través de las muertes cuerpo a cuerpo; nuestro compañero Regas con un machete era una fuerza de la naturaleza comparable a 20 Michonnes. Y hay algún pequeño bug a nivel técnico, pero sin ninguna relevancia para el desarrollo de la partida. También hay que retocar aspectos del matchmaking en el modo PvP. A pesar de que funciona bien y es realmente divertido hacer contiendas de zombis contra humanos, si el rival se va en mitad de la partida el juego sigue manteniendo ahí al equipo que queda, obligándole a esperar hasta que cuando cambian los roles el juego detecta que falta un equipo, con sus consiguientes tiempos de carga.

Me gustaría destacar lo pulido que parecía estar el juego a todos los niveles, obviando los pequeños aspectos del párrafo anterior. La conexión era estupenda, conectaba sin problemas con el resto de compañeros y el crossplay funcionaba como un tiro. Pudimos jugar partidas desde diferentes plataformas con extrema facilidad y sin ninguna clase de problema asociado. Además, hemos podido comprobar que el juego vendrá traducido y doblado al castellano a muy buen nivel. Ya sólo nos queda ver, de cara a la versión final, cómo se comporta el sistema de cartas en el largo plazo, así como la duración total de la campaña y el contenido de lanzamiento. Aquí el problema no va a estar en la cantidad de gente jugándolo, pero desde Turtle Rock Studios deben asegurarse de que el juego llega con contenido de sobra, sobre todo teniendo en cuenta la previsión de DLCs que tendrá.
Huelga decir que no necesitas conocer la serie Left 4 Dead para disfrutar de Back 4 Blood. Si os gustaban esos juegos, Back 4 Blood parece ser el Left 4 Dead 3 que llevábamos años esperando. Y si nunca los has probado antes, vas a descubrir el que está llamado a convertirse en uno de los mejores shooters cooperativos del mercado. En cualquier caso, animaos a probar la beta abierta que tendrá lugar durante los próximos días. Os aseguro que no os arrepentiréis.