Soy muy fan de los juegos de terror y también adoro los point and click (aunque para muchos sean aburridos). Así que cuando supe que Without Escape era ambas cosas me dije a mí mismo “Te va a gustar”. Si bien es cierto que lo he disfrutado, tiene algunos puntos que rompen la inmersión y que aguan un poco la fiesta, pero no adelantemos acontecimientos. Without Escape puede que ya os sea familiar a algunos puesto que salió en Xbox 360 allá por el año 2012. Seis años después llega totalmente remasterizado y mejorado y debo decir que viendo algunas comparaciones el juego ha ganado muchísimo.
La edad te sienta bien
Tras seis años de su primer lanzamiento, Without Escape llega a PC con un apartado gráfico muy cuidado y mejorado con respecto a su entrega en Xbox 360. Nos encontraremos en una casa la mar de detallada que podría ser perfectamente la nuestra (y ojalá lo fuese, obviando la parte de los sonidos y la sangre). Pero donde de verdad me ha parecido brillar ha sido al adentrarme en la parte más loca y de terror del juego. Conforme avanzamos en el título veremos cómo nos adentramos en una especie de dimensión alternativa (un aire muy de Silent Hill) distorsionada e infernal, y realmente te da la impresión de estar encerrado ahí.
Este nivel gráfico permite una inmersión muy buena, que en un point and click de terror es una pieza fundamental para que funcione bien. Además unido a esto tenemos los efectos sonoros siniestros que a los más asustadizos les pondrá los pelos de punta. Without Escape construye una atmósfera más que adecuada para el terror mediante su apartado artístico, te atrapa a simple vista y te invita a explorar más de ese mundo tan familiar y ajeno al mismo tiempo. Posiblemente uno de sus puntos fuertes sea este, explorar esta casa cada vez más macabra ha sido una experiencia que he disfrutado.

Point and click de los 90
Recuerdo haber jugado a Myst en una época en la que me enganché de una manera casi enfermiza a los point and click, este juego fue un fenómeno en el 93 (es más viejo que yo el juego) y logró cambiar la perspectiva que tenían los desarrolladores acerca de los point and click. Wihout Escape bebe sin lugar a dudas de este juego y sus sucesores, pero logra ir a un nivel superior y adaptándose a los tiempos más actuales crea un terror moderno capaz de llegarte, aunque depende de cada uno lo que quiera sumergirse en su mundo.
¿Cómo se juega este título? Bueno, es bastante sencillo. Si mi constante repetición de “point and click” aún no ha hecho que suene una campana en vuestras cabezas no os preocupéis, yo os explico. En este tipo de juegos nos encontraremos frente a una imagen fija, un escenario que deberemos investigar en busca de objetos y puzles que resolver. Unas flechas nos indicarán que nos podemos desplazar a otros lugares (en este caso de la casa) para investigar distintos escenarios. Y ya está, no tienen mayor ciencia. En cuanto a Without Escape no puedo decir que cambie demasiado esta fórmula. Es cierto que su ambientación es un gran punto a tener en cuenta porque es por lo que venimos todos a un juego de terror, y consigue sumergirte, pero después la forma de jugarlo, a pesar de ser muy intuitivo y no romper del todo dicha inmersión, tiene momentos que te pueden sacar de ella (sobre todo si eres un puntilloso quejica como yo).

Como ya he dicho, nuestra misión es investigar distintas zonas de la casa para encontrar objetos que nos sean útiles y resolver puzles. Al principio nos encontraremos con muchas puertas cerradas, así que iniciaremos una (no) divertida caza de llaves recorriendo la casa. Y aquí está un punto débil del juego, no hay nada a lo que aferrarse de lógica, no hay pistas, nada. Debes correr como pollo sin cabeza una casa (que por suerte no tiene demasiadas habitaciones) en la que no se respeta la lógica para colocar llaves. Muchas veces nos encontraremos buscando en sitios al azar para ver si encontramos dichas llaves, a veces en lo alto de una estantería o en un horno; los padres de nuestro protagonista no saben muy bien cómo funciona un horno al parecer.
Pero eso es solo el comienzo del juego, tras esto la experiencia mejora bastante, teniendo transiciones muy suaves entre zonas, con un inventario fácil de usar, que usará los objetos de forma automática en el momento justo evitándonos ese probar objetos porque sí que existe en otros juegos del estilo y que de verdad rompe muchísimo la inmersión.
En cuanto a los puzles que nos encontramos no hay mucho que destacar en cuanto a dificultad. No nos vamos a encontrar con uno de estos puzles que te dejan atascado días en un punto y que tienes que darle vueltas hasta el punto de soñar con él. Tienen la dificultad justa para que necesites pensar un poco y ya está. Esto también sirve para la inmersión, puesto que al dejarnos avanzar sin mucha dificultad no se crea frustración y queremos seguir avanzando en esta misteriosa casa. Dos de los puzles más interesantes son uno en el que debes buscar dos pilas para un mando a distancia (y las pilas están una en cada punta de la casa) y otro en el que debemos jugar a Imagina ser químico con un calentador de agua, todo para abrir la caja fuerte de tu padre. Este último es con el que puede tenerse más dificultad (depende de lo bueno que seas en matemáticas).
En cuanto a duración Without Escape es bastante corto (en una hora puedes completarlo) pero tiene 6 finales distintos, lo cual invita a la rejugabilidad, que son desbloqueables al explorar más por la casa o experimentar con distintas cosas durante la partida. Una vez se han resuelto todos los puzles podremos competir con otros jugadores online para ver quién consigue los otros finales antes, así que podremos ponernos el traje de speed-run y competir por ser los mejores.

Me pareció escuchar un lindo ruidito…
La historia de Without Escape no es lo más impresionante del mundo, pero desde luego acompaña bien y cada final tiene su propio giro de guión necesario para que sea interesante o nos deje realmente intrigados.
Básicamente despertamos a las 2:45 en nuestro cuarto porque un ruido que viene de abajo nos despierta. Nuestros padres están fuera de la ciudad así que ellos no pueden ser, quizás algún animal se ha colado y está trasteando con las cosas de la casa. Así que nos armamos de valor y vamos a investigar. Y esa es básicamente la historia que puedo comentar sin entrar en spoilers (porque merece la pena jugarlo sin saber nada más a partir de este punto), pero el terror a veces parece brillar por su ausencia en un juego catalogado en este género. Sí, tenemos ruidos raros y alguna cosa extraña ocurriendo en la casa, pero para qué vamos a querer escapar con tanto apremio por un par de cosillas sin importancia (soy una persona vaga, no me juzguéis si viendo sangrar a un cuadro no me apetece salir de casa). Llegamos a algún punto en el que el terror hace acto de presencia y los finales le dan ese toque, pero realmente no pasaréis mucho miedo (a no ser que seáis personas miedosas, en ese caso quizás es mejor que no juguéis). Me ha gustado el juego en general pero esta parte es la que me impide darle más nota.

La última habitación
Without Escape es un juego que recupera el espíritu de los point and click de antaño, mejorando algunas cosas pero volviendo a pecar de otras. Crea una atmósfera fantástica rota apenas por un par de detalles de jugabilidad, pero la crea para una historia que tampoco nos cuenta algo muy interesante hasta llegar al final. Pero aún así deseas avanzar más y más en este juego hasta descubrir que está pasando. Esto sumado a sus múltiples finales que se pueden conseguir siguiendo la ruta impuesta por el juego o explorando distintas posibilidades, nos da un juego entretenido para unas cuantas horas (y que lo hace digno de su precio). Una recomendación para los amantes de este género, los fans de juegos como Myst o los que ya lo jugaron en Xbox 360 hace seis años, sin duda alguna Without Escape no os defraudará.
Without Escape
Puntuación Final - 6.5
6.5
Interesante
Un juego perfecto para los amantes del point and click más clásico con tintes de terror y una ambientación perfecta gracias a su cuidado apartado artístico.