Toss! – Análisis PS VR2

Cada vez podemos quejarnos menos, como usuarios, de que hay poca variedad de juegos en VR. Los puzles están más que cubiertos con juegos como The Room VR: A Dark Matter o Another Fisherman’s Tale; las visual novels, con Dyschronia: Chronos Alternate. Incluso tenemos VR Skater, un juego de skate increíblemente bien trasladado a realidad virtual, único en su especie. Ya no son solo una plataforma para shooters sobre raíles: los desarrolladores cada vez se atreven con retos más espectaculares y divertidos. Toss!, el título que nos ocupa, es una de esas ideas geniales que es difícil creer que a nadie se le haya ocurrido antes.

Desarrollado por Agera Games y distribuido por Vertigo Games (conocidos por After the Fall y Arizona Sunshine, entre otros), Toss! representa el primero de su género, al menos en PS VR2: estamos ante un juego de plataformas en primera persona. Sin embargo, no usaremos las piernas para impulsarnos, sino las manos: controlamos a un simpático mono, por lo que nuestra herramienta para agarrarnos a tuberías, salientes y plataformas serán las manos. ¿Listos para hacer un poco el mono?

 Jugabilidad arcade pura

La premisa de Toss! es sencilla y terriblemente adictiva: dividido en más de 70 niveles, con varios mundos/biomas (aunque apenas hay cambios en su fondo y escenarios, que son demasiado simples), tendremos que superar niveles que pueden llevarnos desde minutos a segundos. De hecho, gran parte de la gracias de Toss! es batir récords y marcas de puntuación. Hay varios objetivos que podemos conseguir, y que determinarán si hemos completado o no un nivel al 100%: llegar hasta el final, recoger todos los fragmentos de plátano y hacerlo en una buena marca de tiempo. Incluso se nos contarán los saltos que realizamos.

En su sencillez, radica su principal fortaleza, ya que es una acción simple de dominar que se verá puesta a prueba constantemente con una gran variedad de retos

Además, Toss! es un juego mucho más complicado de lo que parece; aunque en sus primeros niveles, podremos escalar tuberías tranquilamente, como si de una versión simplificada de Horizon: Call of the Mountain se tratara, no tardará en complicarse la cosa: trampolines, obstáculos a esquivar, agarres que se mueven, saltos ajustados… Es normal morir mucho, y no podrás avanzar de nivel hasta que no completes el que toca. La sensación de progresión es brutal, ya que nos acostumbraremos rápido a hacer empujes con los mandos, saltos y agarres de forma simultánea y coordinada al poco de empezar. En su sencillez, radica su principal fortaleza, ya que es una acción simple de dominar que se verá puesta a prueba constantemente con una gran variedad de retos.

Para mitigar esa posible sensación de frustración, el juego cuenta con tiempos de carga inexistentes, por lo que nada más morir podrás volver a intentarlo sin tiempo para que te lo replantees. Esta rapidez y frenetismo, unido a la importancia del ranking de puntuaciones online y la necesidad de repetir niveles para perfeccionar nuestras marcas, dotan a Toss! de una curiosa y maravillosa sensación arcade.

Podéis jugarlo sentado o de pie, pero os recomiendo encarecidamente la segunda opción: gran parte de la gracia del juego está en creérselo; no controles al mono, sé el mono, y la diversión se multiplicará. Cuando coges confianza con el juego, incluso puedes emular a Tarzán en algún nivel, usando una mano para impulsarte y agarrarte a la siguiente plataforma con la contraria, todo seguido. Es un juego que, sorprendentemente, cansa muchísimo. No es en absoluto una mala opción para hacer un ejercicio dinámico y divertido, no pararemos de movernos.

Es cierto que a veces es complicado controlar la dirección del salto. Con los gatillos agarraremos salientes, pero si mientras nos agarramos nos impulsamos con la mano, saltaremos con una dirección y fuerza muy acordes a las que hemos aplicado en la realidad. La refinada jugabilidad que han conseguido con Toss! es digna de elogio, funciona a la perfección y es tremendamente divertido.

Si bien no encontraremos variedad en sus escenarios, ya que son simplemente nubes que cambien ligeramente de color y de momento del día o condiciones climáticas (una estética minimalista que, por otro lado, no molesta y casa perfectamente con el resto del juego), si lo haremos en los desafíos y los modificadores que podemos aplicar. A medida que vamos avanzando, podremos acceder a diferentes opciones para cambiar el juego a nivel estético, pero también añadir nuevas opciones jugables con modificadores que iremos consiguiendo, y que merece la pena que descubráis por vosotros mismos. Simplemente os diré que animan a repetir el juego desde el principio aplicando algunos.

Por supuesto, no esperéis nada de historia o un apartado gráfico revolucionario. Creo que su trama tiene algo que ver con construir una nave espacial, pero sinceramente, estaba demasiado ocupado saltando y el juego tampoco le da ninguna importancia.  Su apartado técnico no destaca, ni a nivel gráfico ni sonoro, pero cumple con la función de presentar un entorno amigable, que no maree y en el que sea fácil localizar los puntos de interés. Tampoco aprovecha características intrínsecas de PS VR2, pero no afecta a una experiencia que no necesita ser más de lo que es.

 Conclusiones

Es muy difícil no recomendar un juego tan valiente y centrado como Toss!. Atreverse a realizar un juego puramente de plataformas en realidad virtual me parece una tarea ardua de la que el título ha salido airoso. Si os gustan los plataformas desafiantes, y queréis experimentarlos desde una nueva perspectiva, Toss! es vuestro juego.