Análisis de Infinity Strash DRAGON QUEST: The Adventure of Dai para PS5

En una remota isla, la paz reina entre humanos y monstruos desde hace años gracias a la derrota del Señor Oscuro, Hadler. En ella habita Dai, un joven huérfano que vive con Blas, monstruo al que considera su abuelo, y Gomechan, una especie de limo única en su especie (tan única que no sale en ningún juego de Dragon Quest y es un personaje original). Tras el retorno de Hadler años después, Dai se embarca en una aventura sin igual en la que descubrirá sus orígenes, hará nuevos amigos y salvará al mundo de una catástrofe nunca antes vista.

Infinity Strash toma como punto de partida la pérdida de memoria momentánea que sufre Dai en un capítulo temprano de sus aventuras para refrescar nuestros recuerdos, nunca mejor dicho, o introducir a nuevos posibles fans a la serie; no hay problema si no tienes conocimiento alguno de la serie original, ya que la historia del videojuego sigue al dedillo la original del manga y la nueva adaptación de anime producida en 2020 por Toei Animation.

 Aventuras sin igual

Tomando la estela de la franquicia de videojuegos original, el mundo de Dai está lleno de color, monstruos diseñados por Akira Toriyama, amistad, amor, humor y aventuras incomparables. En este caso, el título abarca siete capítulos con toda la historia incluida. En el mapa principal tendremos diferentes tipos de misiones: de Historia, Libres y de Aventura, con unas espadas, una bandera y un libro como iconos respectivamente.

El proceso a seguir es muy lineal: veremos una o dos misiones de Aventura en las que se nos explicará qué ha ocurrido en la historia para no perdernos (si queremos, claro, ya que siempre podemos saltarnos las cinemáticas) para a continuación tener una breve batalla con un jefe o contra varios enemigos en una zona pequeña del mapeado a escala.

Lamentablemente, las zonas en las que combatiremos son pequeñas y poco inspiradas. Aunque bonitas, no terminan de desplegar todo su potencial ya que las misiones siempre consistirán en derrotar a todos los enemigos con algunos matices como, por ejemplo, hacerlo con una cuenta atrás o intentando impedir que te detecten, lo que nos lleva al siguiente punto.

 The Adventure of Dai, un musou a medio gas

Infinity Strash tiene lo que podría considerarse un problema principal en su forma de acercarse a qué tipo de videojuego basado en manga y anime quiere ser. Normalmente, si tomamos de referencia los títulos de Naruto que mezclan exploración con combate contra CPU o jugador o los juegos de ONE PIECE que son prácticamente todos RPG o musous (también conocidos como Warriors). En el caso de The Adventure of Dai tenemos una especie de mezcla entre ambos estilos.

El sistema de combate funciona a las mil maravillas.

Como comentaba, el mapeado tiene gran parte de culpa de este fenómeno. Dado que cada misión tiene un mapa concreto que siempre resulta ser una zona pequeña muy delimitada para pelear contra un jefe u otra un poquito más amplia con una mayor variedad de enemigos, no sabemos si estamos ante un estilo de juego u otro, así que podemos categorizarlo como, simplemente, un juego de acción y aventura. No es necesariamente algo malo pero sí creo que es importante reseñarlo para saber qué te vas a encontrar.

Por otra parte radicalmente opuesta, el sistema de combate funciona a las mil maravillas y también podemos decir que hay cierta inspiración en esos musous que ya he mencionado anteriormente. Rápido, con múltiples combinaciones de ataques, con un arsenal de personalización muy competente y con unos personajes, tema que tocaremos a continuación, que se sienten diferentes de controlar entre sí, creando unas sinergias y fluidez de combate que te deja satisfecho al aniquilar a los monstruos sin ser excesivamente complejo.

 En la variedad está el gusto

Podremos controlar hasta a cuatro personajes diferentes, con la ventaja significativa de que cada uno se juega de una forma diferente. Dai se centrará en un sistema de lucha más centrado en el combate cuerpo a cuerpo, Popp en magia a distancia, Maam será curandera pero sus armas irán variando sin entrar en terreno spoiler y Hyunckel será nuestro absoluto tanque que se llevará por delante a todos los enemigos.

Aparte de mejorar las técnicas de nuestros protagonistas al subir de nivel, así como aprender otras nuevas aún más devastadoras, podremos usar los Reminilazos, unas cartas especiales que iremos desbloqueando al realizar objetivos que nos proporcionarán los típicos bonus de estado y mejoras permanentes ya sean de salud, ataque, magia, técnicas, etcétera.

Saber gestionar los Reminilazos será fundamental dependiendo del nivel de dificultad de la misión o del desafío post-historia principal al que nos enfrentemos. También podremos modificar el grupo a nuestro gusto en las misiones libres, aunque jamás en las misiones de historia, para controlar a nuestros favoritos o gestionar como mejor queramos nuestras aventuras. Además, podremos desbloquear atuendos para personalizar a los héroes.

 El Templo del Recuerdo y extras

Poco después de empezar nuestra aventura desbloquearemos el Templo del Recuerdo, una forma de añadir un apartado roguelike para alargar aún más el título. En otros juegos se añaden elementos de este estilo de forma artificial pero en Infinity Strash la buena noticia es que está implementado de forma natural.

El templo tiene su propia dificultad; empezaremos siempre desde el nivel 1 e iremos descendiendo derrotando enemigos al elegir entre dos puertas que nos permitirán aumentar nuestras habilidades según nuestras elecciones para no quedarnos atrás contra el nivel de nuestros adversarios. Estas pruebas ofrecerán recompensas exclusivas que no podrás conseguir en otros lugares.

Además del templo, es importante recalcar que, sin entrar en destripes de historia y sorpresas finales, al finalizar la historia principal tendremos una serie de desafíos de mucha mayor dificultad en los que tendremos que poner toda la carne en el asador para superarlos si queremos ir a por el 100% o a por el Platino, claro.

 Conclusiones