TAPE: Unveil the Memories – Análisis PS4

Tengo una relación extraña con el cine de terror. Por una parte me gusta mucho ya que, como en el videojuego, me parece uno de los géneros más interesantes por las emociones que busca provocar y cómo funcionan. Pero nunca he pasado miedo viendo una película, por muy bien construida que este. En cambio, cuando tengo un mando en las manos soy la persona más cobarde del planeta ¿Qué por qué saco el tema del cine del terror en un análisis de un videojuego? Porque TAPE: Unveil the Memories se nutre de las obras más clásicas del miedo para crear un título que busca ser único.

Si aún no conocéis PlayStation Talents, se trata de un proyecto de PlayStation España en el que se producen varios juegos bajo estudios independientes noveles para promocionar el juego independiente español. Estos juegos suelen caracterizarse por una producción pequeña, de corta duración y que plantean alguna idea interesante. En esta ocasión hablo del estudio de BlackChiliGoat, situado en Madrid, que ha creado un nuevo juego de terror ambientado en la Galicia de los años 90.

 Descubriendo la verdad

Como he dicho, TAPE: Unveil The Memories trascurre en las tierras de España, específicamente en Galicia, aunque toda la trama se da en interiores, así que no veremos ningún campo abierto donde se vea realmente esta tierra. Controlamos a Iria, una joven amante del cine e hija de uno de los directores más reconocidos dentro del género del terror. La historia empieza cuando Iria encuentra una cinta dirigida a ella en su habitación, que parece ser de su padre.

Recorreremos varias estancias que formaron parte de la vida de nuestra protagonista y que guardan alguna relación con su desaparecido progenitor. A través de diferentes cintas de vídeo podremos comunicarnos con él e ir aprendiendo qué pasó realmente en nuestra infancia. Todo esto mientras un monstruo compuesto de cintas y con objetivos como ojos nos persigue e intenta darnos caza.

Cabe mencionar la gran cantidad de trigger warnings (desencadenantes de la historia que pueden herir la sensibilidad de alguien) que tiene TAPE: Unveil The Memories. Numerarlos podría hacer spoiler, y la lista resulta tan larga que da la sensación de que se podría haber contado más con menos. No ocurre nada realmente explícito dentro del juego, tanto las cinemáticas como las escenas de gameplay son completamente seguras. Aún así, prevenir con estos avisos es algo que siempre agradezco enormemente en este tipo de juegos.

 La sustancia del terror

El terror puede tomar muchas formas. Lo sobrenatural, las fobias, los eventos traumáticos o el común miedo a la muerte. Normalmente cuando hablamos de videojuegos de terror se suele escoger la ruta de lo sobrenatural, al menos en los primeros compases de la historia. Esto provoca que el jugador pueda sentir tensión sin tener que empatizar directamente con el protagonista de la historia, ya que si el avatar sufre miedo pero el jugador no se crea una disonancia que puede romper la suspensión de la incredulidad.

Una vez se van descubriendo el origen y personalidad del protagonista es cuando se pueden introducir los elementos que pueden provocar un terror más «real»: Traumas y hechos del pasado con los que podemos empatizar al haber pasado tiempo controlando al personaje y comprenderle mejor. Esto es una formula clásica del género que lleva muchos años en funcionamiento, como por ejemplo en el clásico Silent Hill 2.

TAPE: Unveil The Memories no hace esto. Desde el primero minuto la historia es una muy personal. Todo gira en torno a Iria y su padre, provocando una reacción que puede dañar la experiencia del juego.

Este enfoque hace que los giros de guion se vean venir desde mucho antes. Al saber que todo gira en torno a la figura del padre de Iria y ver metáforas nada sutiles desde el primer minuto, no hay que ser un genio para saber por dónde van los tiros.

Después del plot-twist principal esperan otros, pero llegan de una forma tan abrupta y se resuelven tan rápidamente que te dejan un poco indiferente.

Es muy difícil construir bien una historia de terror, porque tienes que dejar ver al jugador sin decirle directamente nada. Pásate de explícito y será demasiado obvio. Quédate demasiado corto y nadie entenderá tu juego. Pero eso no quita que el argumento de TAPE: Unveil The Memories me haya dejado un sabor algo amargo.

 La figura del monstruo

Nos cruzaremos con escenarios de El Resplandor, detalles como los patrones de las paredes, e incluso niveles que pueden recordar a alguna de estas películas

Pero suficiente con la historia. Pasemos a hablar de cómo se juega a TAPE: Unveil The Memories. Como todo juego de terror que bebe del walking simulator, estamos más ante una aventura con algunos puzles que sortear para poder avanzar que a una obra de acción.

El problema principal de los rompecabezas planteados aquí es que no requieren de ingenio para superarse. Más bien sabes qué tienes que hacer desde el primer momento, pero sabes que va a llevar un tiempo. Esto también viene provocado por la mecánica principal del juego: El uso de una cámara que permite hacer que los objetos avancen o retrocedan en el tiempo.

El truco de esto es que la cámara tiene una batería para acumular el tiempo. Esta batería es necesaria para resolver los obstáculos, así que para no provocar un softlock tiene que haber un sitio donde extraer o dejar el tiempo. Así que muchas veces nos encontramos yendo a la zona donde tenemos que usar la cámara, gastando la batería y volviendo sobre nuestros pasos para recargarla, algo tedioso que rompe mucho la tensión del juego.

Por otro lado tenemos al monstruo de TAPE: Unveil The Memories. Este ser tiene el problema de que deja de dar miedo en su segundo encuentro: La IA es bastante pasiva y solo nos atacará si estamos muy a la vista. Además no es especialmente rápido y se limita a patrullar algunas zonas de forma muy predecible. Esto provoca que nuestro antagonista termina siendo una molestia que alarga aún más los «rompecabezas» que encontramos.

 Referenciando el cine de terror

Es muy difícil construir bien una historia de terror, porque tienes que dejar ver al jugador sin decirle directamente nada

Uno de los mayores atractivos a la hora de vender TAPE: Unveil The Memories han sido sus referencias e influencia hacia el cine de terror clásico, en especial a la obra de El Resplandor. Pero aquí hay que saber diferenciar entre los guiños a algo y una referencia de por sí.

Según avancemos por nuestro subconsciente encontraremos muchas películas de vídeo que hacen guiños a obras clásicas con algún título en forma de parodia. Y aunque esto puede ser un divertido gesto en algunos puntos, puede llegar un momento en que llega a ser hasta pesado.

Por otro lado, sí que encontramos referencias como tal mientras jugamos. Nos cruzaremos con escenarios de El Resplandor, detalles como los patrones de las paredes, e incluso niveles que pueden recordar a alguna de estas películas.

Es cierto que los amantes del género pueden encontrar aquí una carta de amor, pero por lo general está creado de una forma tan poco sutil y tan a menudo que también daña un poco a la individualidad de TAPE: Unveil The Memories como obra propia.

 Conclusiones

Creo que la idea que hay detrás de este juego de PlayStation Talents tiene mucho potencial: Un juego de terror que recorre los recuerdos y el subconsciente de alguien mientras bebe de la influencia del cine de terror, tanto para potenciar su historia como para servir de carta de amor para los fans. Pero, al menos en mi experiencia, esta ejecución se ha quedado a medio camino.

Aunque cabe señalar que dentro del apartado gráfico el juego cumple con creces, sobre todo teniendo en cuenta el tamaño de producción que suelen tener los juegos de PlayStation Talents. Además de que cuenta con un doblaje completo al español, con frases y expresiones gallegas para vender la ambientación de la obra.

Ningún apartado me parece realmente destacable de TAPE: Unveil The Memories. Tampoco ninguno me parece que funcione horrible. En general ha sido una experiencia estándar, de tarde en el sofá, pero donde si he lamentado que algunas de las ideas no estén bien ejecutadas y que le falta centrar sus esfuerzos en convertir alguno de sus apartados en algo realmente memorable.