A nadie le gusta comprar otra vez el mismo juego. Muchas veces las compañías reciclan tantas ideas de proyectos anteriores que el producto final se siente algo insípido. Esto ocurre normalmente debido al poco tiempo que se da de producción entre un juego y otro, algo que ya vimos durante la época más oscura de Assassin’s Creed o durante muchos Call of Duty. Por eso a veces, cuando una saga empieza a durar durante cierto tiempo, saltamos fácilmente a criticarlo de ser un reciclado o el mismo juego. Aunque esto pueda tener cierta parte de razón, creo que no nos paramos a evaluar el contexto de cada uno.
Splatoon 3 obviamente no se ha librado de estas críticas. La poca inclusión de nuevos mapas y armas en su lanzamiento inicial ha sido foco de muchos comentarios en internet, argumentando que es una especie de «Splatoon 2.5» ¿Son fundamentadas estas críticas? ¿Merece la pena Splatoon 3? ¿O quizás esta es la solución para evitar un modelo de negocio lleno de micropagos y políticas cuestionables?
No es cuestión de crear, sino de pulir
No creo que se pueda pedir mucha innovación a un juego que ya lo hace bien y que simplemente quiere mantenerse en el mercado moderno
Normalmente suelo comenzar hablando del modo historia de un juego o de, al menos, su narrativa. Pero creo que en este caso es más importante empezar con lo fundamental de Splatoon 3: Su jugabilidad.
Es comprensible que viendo vídeos de diferentes partidas del nuevo juego de la franquicia pueda parecer que es exactamente igual que su anterior entrega. Pero cuando empiezas a jugar notas las diferencias. Splatoon 3 se nota más fluido y ágil que su predecesor. Cada entrega de la moderna IP de Nintendo ha ido acelerando el ritmo de la acción un poco, ya sea modificando algunas de las mecánicas principales o con pequeños detalles.
La acción en sí misma sigue siendo igual de frenética y loca. Las partidas son rápidas y no dan un segundo de descanso. Siempre estaremos en movimiento, disparando o ambas, y las reapariciones son tan cortas que apenas podremos pararnos a pensar. Aún así el escenario cuenta con mucha claridad y es muy difícil perderse en mitad de todo el espectáculo, así que no suele producirse frustración por parte del juego, evitando así muertes irritantes.

Las nuevas armas, la espada y el arco, ofrecen una variedad que, aunque limitada, se agradece bastante. El estilo de cada una de ellas se siente innovador y su diseño contiene la suficiente complejidad para que tengas que jugar unas cuantas partidas antes de dominarlas.
Por último, sus nuevos escenarios siguen manteniendo la filosofía de diseño clásica de Splatoon, pero en esta ocasión sí que vamos viendo cómo cada vez se introducen nuevas mecánicas en el mapa, que recuerdan un poco a lo que vemos en las campañas singleplayer del mismo.
Mejoras del multijugador
No solo ha mejorado la jugabilidad de las propias partidas. Splatoon 3 también ha tenido en cuenta mejoras en la calidad de vida del modo online. Esto incluye que ahora podremos experimentar con las armas en un pequeño escenario de prácticas mientras buscamos partida, e incluso interactuar y ver qué hacen el resto de nuestros compañeros.
Por otro lado el sistema de las tiendas ha recibido algunos ajustes. Si no estas muy familiarizado con la experiencia online de Splatoon 2 quizás no lo notes. En primer lugar puedes cambiar las mejoras principales de tus piezas de ropa, lo que significa que ya no será necesario llevar ese horrible gorro porque era el único con esa habilidad que tanto querías. Lo segundo es que las armas se compran por tickets en vez de por dinero. Conseguiremos tickets usando en repetidas ocasiones estas armas o subiendo de nivel. Así podremos probar diferentes estilos de juego sin tener que sacrificar el dinero que podemos gastar en piezas de ropa nuevas.
En lo referente a la conexión, aunque es cierto que el juego en su momento de lanzamiento tuvo ciertos problemas, Nintendo ha trabajado rápidamente para solucionarlos en un parche. En este apartado es difícil hablar por la experiencia de todos, pero al menos en mi caso no he tenido ningún problema destacable.

También tenemos otras formas de disfrutar de Splatoon 3 sin recurrir a las batallas online pvp. El modo de juego PvE Salmon Run ha vuelto con nuevos desafíos y disponible de forma permanente, mientras que Table Turf ofrece un curioso juego de cartas que permite descansar de tanto tiroteo.
Mamíferos contra peces
Ahora sí que toca hablar del modo historia de Splatoon 3. Desde su primera entrega este apartado siempre me ha sorprendido mucho. Normalmente cuando hablamos de un shooter centrado en la experiencia multijugador, nos encontramos con una campaña que suele funcionar como tutorial glorificado. Splatoon 3 en cambio es un tutorial glorificado, pero muy divertido.
El modo campaña esta dividido en una pequeña introducción, seis islas y un escenario final. Deberemos avanzar de una isla a otra usando a nuestro pequeño acompañante para que se coma el plasma pelificador, un nuevo reactivo extraño que consume todo a su paso y lo llena de pelos. Para poder librarnos del mismo deberemos completar diferentes niveles y conseguir caviar rojo.
Así se crea una progresión personalizada según el usuario: No hay un número de niveles mínimo que haya que completar. Solo tenemos que llegar a la siguiente isla y derrotar al jefe si es necesario. Lo único que nos bloquea el paso es el plasma, así que si creamos una buena ruta podemos completar el modo historia sin siquiera ver la mitad de los niveles.

Aunque hacer esto es una tontería, porque estos niveles son muy divertidos. Podemos realizar cada nivel con varias armas, cada una ofreciendo recompensas diferentes según su dificultad, algo heredado directamente de la Octo-expansión de Splatoon 2. Además, como viene siendo costumbre, estos niveles sirven para familiarizarse con todas las mecánicas que luego encontraremos en nuestras partidas multijugador, desde conocimientos básicos al uso de los nuevos poderes.
Por último, aunque la historia y el jefe final me han parecido quizás algo más flojos que en anteriores entregas, esto se ve compensado por el carisma de los personajes y las pequeñas cinemáticas, que tienen con unas animaciones muy superiores a las vistas anteriormente. El nuevo grupo idol, Deep Cut, roba cada escena en la que aparece mejorándola de una forma magistral.
Conclusiones
Estoy muy contento por Splatoon 3. Por un lado, porque es un juego muy divertido y pulido al que pienso seguir echando muchas horas después de terminar este análisis. Por el otro, porque es uno de los pocos juegos que se centra casi exclusivamente en su experiencia online y que no cae en las políticas que son llevadas hoy en día. Siempre elegiré un juego nuevo cada ciertos años antes que uno que se mantiene gratuitamente gracias al coste de pases de batalla de pago, cosméticos y microtransacciones que, según el juego, terminan siendo ridículamente abusivas.
No creo que se pueda pedir mucha innovación a un juego que ya lo hace bien y que simplemente quiere mantenerse en el mercado moderno. Pero aún así, Splatoon 3 innova de una forma sutil: En sus mejores animaciones, en sus mejoras de calidad de vida y en otra mucha cantidad de detalles que, aunque puedan parecer menos importantes, suman mucho a la experiencia del juego.
Splatoon 3
Puntuación Final - 9
9
Imprescindible
Tanto si eres fan de la saga o alguien nuevo, Splatoon 3 será algo que te atrapará, ya sea por su jugabilidad, banda sonora, personajes o estética.