El año pasado llegaba a nuestras consolas la nueva propuesta de People Can Fly, los creadores de Bulletstorm, centrada en el género de los looter shooter: Outriders, un shooter en tercera persona fuertemente orientado al multijugador (de hasta tres personas), aunque sin por ello descuidar su historia. Si bien su trama principal no era especialmente destacable, sí que había un gran esfuerzo por parte del estudio de crear un universo rico, bien cohesionado y con una gran variedad de localizaciones y secundarios… aunque, por lo menos en mi experiencia, con una tremenda falta de carisma. Sin embargo, tampoco esos son los motivos por los que Outriders ha conseguido enganchar a mucha gente con su propuesta, pero sí por su adictivo gameplay y sus estupendas sensaciones a los mandos, sobre todo si jugamos acompañados. Outriders: Worldslayer llega con la promesa de convencer tanto a nuevos jugadores como a veteranos del juego base, incluyendo también las mejoras introducidas en New Horizon. Os contamos cómo ha sido nuestra experiencia en PS5.
Más grande y mejor
Outriders: Worldslayer nos ofrece bastantes novedades, tanto a nivel de historia como a nivel jugable. Por un lado, tenemos una pequeña campaña de alrededor de cinco horas, donde exploraremos una nueva región y nos enfrentaremos (al fin) a un villano temible y carismático: Ereshkigal, una Mutación que se revela como la amenaza a batir en cierto punto de esta campaña, aunque se podría haber aprovechado más desde el principio de la misma. De esta forma, y también gracias a su más compacta duración, se consigue un recorrido por la trama mucho más claro, placentero, e incluso interesante, que con la historia del juego base.
Las nuevas posibilidades de personalización, así como la trama, los retoques del sistema de looteo y el endgame, son los principales alicientes de Outriders: Worldslayer
Uno de los principales aciertos de Outriders: Worldslayer es que podremos lanzarnos directamente a la expansión, aún sin haber terminado el juego base. Podremos importar el personaje que teníamos, o crear uno nuevo para la ocasión, para que alcancen el nivel 30, que permanece como el máximo. A partir de este punto, la mejora de nuestro personaje dependerá de los nuevos árboles de habilidades PAX (dos por cada una de las cuatro clases de personaje) y los puntos de Ascensión, capaces de personalizar de una forma mucho más profunda la build de nuestro Outrider. No solo eso, sino que el experimentar con estas nuevas posibilidades es un muy buen aliciente para probar otras clases diferentes, sobre todo teniendo en cuenta las facilidades que da el juego a la hora de empezar con un personaje ya bastante poderoso de por sí (puedes redistribuir los puntos en todo momento para ir probando otras configuraciones).
También notamos mucha diferencia en el equipamiento que conseguimos. La calidad del looteo también me parece más destacable en esta nueva expansión, siendo el nuevo equipo Apocalipsis una delicia capaz de crear sinergias verdaderamente divertidas con nuestros poderes; incluyen una tercera ranura de modificación para que podamos intentar nuevas combinaciones. Este nuevo equipo está relacionado con los nuevos niveles de dificultad de mundo Apocalipsis, nuevas graduaciones para conseguir este codiciado equipamiento a la vez que experimentamos un mayor desafío.
Como podéis ver, las facilidades a la hora de evolucionar a un personaje cada vez más específico se han potenciado al máximo en este contenido. Sin duda, el principal perfil al que recomendar esta expansión es a aquellos jugadores que, no solo disfrutaron de Outriders, sino que gustan de experimentar con las numerosas posibilidades que ofrece a este respecto el juego; con Outriders: Worldslayer, estas posibilidades se ven expandidas para ocupar un número tremendo de horas.
Lootea, muere, repite
Añade también una característica muy demandada: el postgame llamado Tarya Gratar, dividido en diferentes secciones destinadas a conseguir diferentes piezas de equipamiento en mazmorras secundarias; un festival del farmeo con toques roguelike y de una dificultad endiablada. No es la forma más divertida de jugarlo (aunque sí es una estupenda fantasía de poder), pero puedes completar en solitario tanto el juego base como esta expansión; sin embargo, este postgame ofrece una dificultad que parece totalmente pensada para ser desafiada en cooperativo.
Si bien es cierto que es una opción que puede alargar mucho la vida útil de Outriders: Worldslayer, sí que me ha parecido que desaprovecha muchos de los pequeños logros que esta expansión ha conseguido a nivel jugable. Por ejemplo, en la historia de Outriders: Worldslayer hay momentos en los que se intenta cambiar el limitadísimo diseño de niveles que presentaba el juego base. El diseño de niveles de Outriders siempre ha estado muy marcado por el uso de las coberturas, algo que en muchas secciones de Worldslayer cambia, lanzándonos a refriegas en campo abierto donde tendremos que movernos constantemente e improvisar. Realmente crea nuevas sensaciones con un cambio tan pequeño. Sin embargo, no es algo que se traslade a Tarya Gratar, que es tan repetitivo como rebosante de contenido. Eso sí, arrasar el escenario acompañado de otros Outriders, desatando cada uno los poderes de su clase, sigue siendo un espectáculo.
Conclusiones
Con un precio de 39,99€, Outriders: Worldslayer constituye una expansión que incluye una nueva sección de historia, añade mecánicas y retoca el looteo gracias a sus nuevos (y numerosos) equipamientos. Quizás sea un precio algo elevado para el contenido que incluye, pero eso es algo que tiene que valorar cada uno según la cantidad de tiempo que dedique a Outriders, algo fundamental en un juego de estas características, destinado a ocupar decenas, si no cientos de horas.
En lo personal he disfrutado mucho de todo lo que ofrece Outriders: Worldslayer, aunque no viene a revolucionar los cimientos de su juego base. Si no comulgaste con su propuesta inicial, difícilmente te engancharás en este punto; aunque es cierto que el contenido que incluye es más divertido de jugar, tan solo construye sobre lo ya establecido. Si te gustó el juego base, así como sus posibilidades de personalización del personaje, aquí tienes mucho más de eso para disfrutar. Y si además sueles jugar acompañado, te diría que es un contenido casi imprescindible gracias al endgame de Tarya Gratar, especialmente concebido con el multijugador en mente.
