Los juegos nos generan diferentes impresiones, desde que los esperamos hasta que los adquirimos y jugamos, además de cuando ya tienen un tiempo. Todas estas impresiones por lo general varían, pero en muchos casos al menos las primeras se suelen mantener firmes, sobre todo si el juego es lo que esperábamos. Todo esto evidentemente si esperamos algo para bien, ya que las impresiones negativas por lo general puede que nos hagan ni siquiera adquirirlo, aunque nunca lleguemos a saber cómo es de verdad.
Por otro lado, y en muchas ocasiones, nos acercamos a los juegos con desconocimiento, ya sea porque estamos mirando que adquirir y se cruzan en nuestro camino o porque como ha sido mi caso, surge una oportunidad de hacerte con él y analizarlo. Este ha sido mi encuentro con Killsquad, un juego de manufactura española y estilo ARPG, que dividido en misiones coge elementos de rogue-lite para dar como resultado algo distinto y bastante divertido.
Un grupo de lunáticos peligrosos
En Killsquad se nos plantea la típica ambientación espacial de cazarrecompensas que, con algo de temeridad y un punto de locura, llevan a cabo toda clase de trabajos, los cuales por lo general consisten en ensaladas de tiros y tortazos por doquier. Pero más allá de la propia presentación del juego tanto la trama como la narrativa son excusas para justificar el propio gameplay.
Tener la historia al servicio del propio juego es algo muy común en los videojuegos y más en los de este estilo. Todo esto para darle cohesión a las mecánicas y que no sean un frío sistema con el que jugar. En este sentido Killsquad no lo hace ni mejor ni peor que otros títulos, aunque sí que se puede destacar una verdadera intención de contarnos cosas de su mundo, a través de pequeños sucesos y conversaciones entre misiones. Un elemento que, si bien no es primordial, aporta al conjunto del juego, dotando a los personajes de personalidad y al mundo de cierto trasfondo, el cual está a la altura de cualquier triple A.

Estos datos que nos van facilitando están hechos para que según tus ganas como jugador puedas sumergirte más en su lore o no, ya que hay gente que solo quiere estos juegos para pasar el rato y ni siquiera se leen las conversaciones. Pero por otro lado los hay más perspicaces y concienzudos que quieren de los juegos una experiencia más completa. Por suerte Killsquad es un juego que puede satisfacer a ambos de manera muy competente, el cual además y lógicamente podemos disfrutar en castellano.
Combate sin tregua
En cuando al sistema de juego estamos ante el resultado de un trabajo de equilibrio que, aunque tiene aún cosas que pulir, denota cierto esfuerzo por crear una experiencia que nos lleve al límite en ciertos momentos. Haciendo que morir sea un factor a tener en cuenta sobre todo si jugamos solos, ya que en equipo con otras personas estas pueden revivirnos. De todas formas, como juego en general es muy poco punitivo y nos revivirá cerca de la zona donde morimos, aunque al final esto depende más de cómo está repartido el nivel y sus checkpoints.

En términos generales la sensación del gameplay es trepidante y dinámica, no podremos parar casi ni un segundo y la esquiva será nuestra mejor aliada. Rodeados de enemigos y casi sin poder centrar la mirada en un solo punto, tendremos que combinar nuestro ataque base con nuestras habilidades, todo mientras subimos de nivel en cada partida, un poco al estilo de juegos como LOL. Este planteamiento le sienta como anillo al dedo al juego, ya que las partidas generan dinámicas algo distintas cada vez que las repetimos, haciendo que la acción inmediata nos centre en ellas. Además, el juego en si acaba siendo infinito y tiene diferentes rangos que nos animan a mejorar y a usar el chat para encontrar a compañeros y compañeras con los que afrontar los retos más difíciles, por lo que todo el sistema está pensado para que no sintamos la más mínima sensación de hastío, pese a repetir lo mismo varias veces.
Los cinco personajes que de momento tenemos a nuestra disposición son la verdadera clave de todo, ya que cada uno combate de una forma distinta. Esta forma tan distinta de funcionar en el campo de batalla hace que si pasamos de uno a otro casi parezca que jugamos a juegos distintos, una afirmación que aun pudiendo ser una exageración por mi parte no deja de estar muy cercana a la realidad. A esto hay que sumarle el gran trabajo en cuanto a diseño de niveles, el cual nos regala fases bastante distintas unas de otras. Una realidad palpable que, aunque se basa en términos generales en destrozar enemigos, se crea alrededor de la razón que nos lleva a ello, ya sea porque protegemos un convoy, porque tenemos que movernos de forma estratégica en unas zonas aisladas de veneno y muchas más situaciones. Este combo, los personajes y las fases hacen un conjunto maravilloso, que se disfruta muchísimo más cuando encontramos una partida multijugador o alguien se une a la nuestra, en este caso no solo vivimos la experiencia al 100% sino que además nuestra relación con el entorno se vuelve algo más benévolo y disfrutable si cabe.

La variedad es la enseña de Killsquad y esta, además de en lo antes mencionado, reside en la cantidad de equipo que conseguiremos, cosméticos, mejoras etc. Todo esto denota que estamos ante un juego donde el loot es la clave de la mejora y aunque en algunos juegos esto llega a ser algo insulso y sin sentido, no es para nada el caso de este título. Aquí cada arma tiene una configuración, que no solo afecta a su elemento o daño, también nos proporciona características secundarias de lo más útiles. En cuanto a la mejora de habilidades, estas se consiguen con unos objetos que ganaremos haciendo las diferentes misiones, haciendo las veces de lo equivalente a subir de nivel en cuanto a mejora permanente. Aunque también tendremos otras referencias como el vector, que no es nada más y nada menos que la puntuación media de nuestro equipo, o nuestra afinidad con las diferentes facciones la cual subirá según hagamos misiones para ellos.
Colores, laser y metal
Estamos ante el resultado de un trabajo de equilibrio que, si bien tiene aún cosas que pulir, denota cierto esfuerzo por crear una experiencia que nos lleve al límite en ciertos momentos
Puede que a priori Killsquad tenga un estilo artístico bastante común, que en términos generales es bueno, pero no destaca demasiado. De todas formas, esto es algo completamente superficial, ya que la realidad es otra a la hora de jugar. Según vamos jugando partidas y conociendo el juego más en profundidad, su estilo cala en nosotros hasta hacerse icónico, algo que es mucho más palpable según vamos desbloqueando además de nuevos objetos, diferentes comenticos para los personajes.
Con un par de horas de juego ya estaremos totalmente dentro de este mundo y tanto su estética como los personajes nos encantarán. Todo se hace cómodo con el uso, desde los menús hasta el aspecto de los mismos, incluso fliparemos con las celebraciones de los MVP, aunque nunca consigamos ninguno (al menos en mi caso). En parte esto es debido a que muchas veces las cosas nos gustan casi más por costumbre o por inercia, por lo que darles una oportunidad a nuevas propuestas, puede darnos una gran alegría.

La banda sonora de Killsquad no destaca demasiado, aunque es bastante funcional y en este sentido cumple muy bien con su misión. Es una pena que no pueda ser algo más icónica, ya que en su conjunto este juego apunta maneras, pero de todas formas es un detalle menor que no resta en absoluto.
Conclusiones
La experiencia con Killsquad ha sido muy grata, es un juego que a priori parece del montón, pero que a la hora de la verdad derrocha personalidad y una calidad en su desarrollo digna de los AAA. La clave está en el mimo que demuestra en todos sus apartados y la especial genialidad que derrocha en su diseño de niveles.
Puede que en términos generales no sea un juego perfecto y el hecho de no tener un gran presupuesto pueda lastrar ciertos detalles, como el multijugador, que si bien no está mal, le falta alguna vuelta. Pero todo esto acaba en un segundo plano, ya que Killsquad vale cada euro que cuesta, otra prueba más de que España es una potencia del videojuego, donde la genialidad y el trabajo duro, son marca de la casa.
Killsquad
Puntuación Final - 8.5
8.5
Recomendado
Un juego muy divertido que derrocha personalidad y calidad, ejemplo de que España es una potencia en la creación de videojuegos.