DARQ: Complete Edition – Análisis Switch

Los creadores de videojuegos que se atreven a profundizar en las pesadillas humanas son, en mi opinión, un regalo del cielo.

Lo grotesco y aterrador vende. Una buena ambientación y un ritmo estudiado son una combinación explosiva; la misma que Unfold Games ha sabido exprimir hasta la última gota en DARQ (en esta ocasión, hablamos de su edición completa).

No hace falta recurrir a un sinfín de sustos continuos ni a una carnicería sangrienta para ponernos los pelos de punta. DARQ es muy diferente a muchos de los títulos del género. Tal vez por eso, sea muy recomendable darle una oportunidad.

 Todo gran sueño comienza con un gran soñador

Lloyd es un muchacho que experimenta lo que con gran acierto se asemeja a un viaje astral. Es el inicio de cada uno de los capítulos que componen DARQ; noches plagadas de pesadillas y puzles que desafían las leyes de la física.

Una conexión con el protagonista que irá haciéndose más fuerte conforme avancemos en esta pequeña aventura. No esperéis fantasmas ni matanzas sin ton ni son. Aquí, incluso los enemigos tienen un diseño especial. La vulnerabilidad y la necesidad de resolver los acertijos cuanto antes son los puntos fuertes de este título.

La aventura no es un quebradero de cabeza en cuanto a control se refiere. Lo es, más bien, el juego de planos y perspectivas con las que Lloyd tendrá que jugar para escapar de cada una de sus pesadillas. Paredes que rotan, manivelas que lo harán cambiar de plano, la gravedad y un montón de objetos perdidos que serán la clave de su huida. Desde piernas cercenadas hasta pianos de juguete, aquí todo vale, porque estamos en el mundo de los sueños, ¿verdad?

 Una personalidad única

Lo primero que pensé cuando comencé mi partida fue: ¿Y esta maravilla?

No sabía mucho del juego, por no decir nada. Para una persona aficionada a las ambientaciones extrañas y oscuras, esto fue como un regalo.

El diseño es elegante hasta decir basta. Inevitable también comparar a nuestro protagonista con los diseños que caracterizan el arte de Tim Burton, una más que agradable inspiración. Los enemigos, escasos pero efectivos, harán que te lo pienses dos veces antes de desafiarlos, ya que no hay escapatoria posible si no utilizas el sigilo a tu favor.

Es un título muy inmersivo a nivel psicológico. La opresión de Lloyd casi traspasa la pantalla, haciendo que el jugador se involucre al máximo en la historia que se cuenta sin necesidad de palabras.

 No por mucho tiempo

Creo que uno de los puntos fuertes y a la vez, débiles del juego, es su duración. Acabarás cada capítulo en muy poco tiempo, pero es muy satisfactorio resolver los puzles.

En su edición completa añaden dos niveles más: La Torre y La Cripta. Muy logrados y con una duración algo más extensa que su historia principal. Mención especial a La Cripta, cuya jugabilidad eleva con ganas el alma de la originalidad y la dificultad se multiplica por dos.

Los objetos coleccionables escasean, pero tampoco se echan mucho de menos, la verdad. Si eres un jugador completista no te llevará mucho tiempo conseguirlo todo.

Carece casi por completo de una banda sonora como tal. DARQ se apoya en unos efectos de sonido que conducen muy bien cada uno de los pasos de Lloyd, formando parte de la variedad de escenarios y diseños que pocas veces hemos visto antes en un videojuego. Una pesadilla que se sirve con buen gusto.

 Arriba, dormilón

No hay muchos errores en este título, o al menos, yo no he encontrado fallos que lo hagan injugable o pesado. Un par de errores muy puntuales que no volvieron a suceder. Teniendo en cuenta la enorme carga de trabajo que arrastra el juego (dado que casi corre a cuenta de una sola persona), es de alabar el resultado final.

Me ha gustado mucho la ausencia de una narrativa que no es necesaria. No peca de tener detalles que no aportan nada; desde el principio te sumerges en las pesadillas de Lloyd, y creedme cuando os digo que no soltaréis el mando hasta completarlas una a una.

 Conclusiones

Para los fans de títulos como Limbo o Little Nightmares, esta es una experiencia obligatoria. No apta para todos los jugadores, en mi opinión.

Magistral en diseño artístico, los detalles de cada escenario y su manera de resolverlo todo le otorgan una personalidad única que hace resaltar todo el buen trabajo que hay detrás. Es por esto por lo que me enfada que no haya más puzles, más niveles, más horas de juego. Es una experiencia tan corta que hasta lo lamentas, porque aventuras como esta son, por desgracia, escasas en la industria.

Habrá mucha gente que lo critique. La escusa del: ¡Es que no da miedo!, pues claro que no. DARQ es más que esas historias que estamos hartos de ver una y otra vez; es asfixia, el placer onírico, los por qué en cada uno de los pasos de Lloyd sin saber con exactitud como ha llegado a sufrir cada noche esas terribles pesadillas.

Una oportunidad de oro que recomiendo a todo el que busque algo diferente en ese mercado independiente que cada día tiene más fuerza entre las grandes compañías.