Bleak Faith: Forsaken – Análisis PC

Jugar un título en acceso anticipado es siempre un salto al vacío, sabes que por una parte lo que estás probando es un producto inacabado pero, así mismo, o por lo menos en lo que a mi opinión conviene, tienes que ver en esos esbozos iniciales las bases de lo que sentarán el titulo completo, y algunos los suelen hacer mejor que otros.

Bleak Faith: Forsaken es un ejemplo de estos títulos en early que, pese a tener buenos planteamientos, se encuentra carente de muchos aspectos necesarios para considerarlo un juego redondo, y sin embargo, el juego se encuentra disponible al público general casi en el mismo estado del que estaba en el early; pero vamos poco a poco, porque esta historia es larga.

 La dominación robótica

Bleak Faith: Forsaken es un titulo soulslike desarrollado por Archangel Studios, un estudio independiente formado por solo tres personas; no suelo mencionar mucho esto, pero veremos como cobra sentido mas adelante. Al ser un título inspirado en el genero souls la historia es muy escasa, pero vamos a intentar crear algo coherente con lo que tenemos

Estamos en la Omniestructura, un mundo destruido tras acontecimientos desconocidos que parece estar en constante evolución, expandiéndose y rotando mas cada segundo que pasa. La estética combina elementos futuristas con la fantasía medieval a la que estamos acostumbrados en estos títulos, donde nos podemos encontrar cosas tan normales como cavernas cubiertas de cables o robots atacándonos con hachas a dos manos.

 Un combate algo extraño

Ya que estamos hablando de ataques vamos con el combate, porque este es el primer muro que nos encontramos. Así de primeras, los desarrolladores recomiendan jugar al titulo con teclado y ratón, lo cual es bastante raro así: todos los souls siempre han sido mucho mas manejables con mando, pero ya veremos las ventajas de esto mas adelante, porque tiene implicaciones bastante profundas con el propio diseño del juego

El combate es bastante sencillo de entender, con un botón atacamos y con el otro bloqueamos. El juego cuenta con una mecánica de parry; si conseguimos bloquear de manera perfecta, no solo no recibiremos daño de ese ataque, sino que solo consumiremos una nimia cantidad de resistencia. Además, el enemigo se desequilibrará. Esta mecánica viene con un giro, los bosses del juego, los enemigos cuyos ataques nos pueden destruir de solo un golpe o dos, son totalmente inmunes al parry. Esta idea es tan descabellada que una persona que estaba probando el early lo comento como un bug hasta que un desarrollador dijo en una sola frase «Bosses can’t be parried«; todos en ese Discord nos quedamos boquiabiertos, pero bueno, cada loco con su tema.

 Mucho que hacer, pocas explicaciones

En cuanto a la personalización de nuestro personaje, es bastante compleja, con un sistema típico de RPG con todas sus ranuras de armadura, anillos, cinturones, armas y toda la parafernalia, con estadísticas para todo, aunque con una gran falta de descripciones, como una que dice «Daño a puntos débiles» sin afinar muy bien cómo funciona exactamente. Además de esto, hay un sistema de habilidades y pasivas desbloqueables; ojalá entender para explicarlas, pero con mi nulo conocimiento y las escasas explicaciones del titulo, me voy a quedar con que existen y son muchas.

El juego también cuenta con un sistema de creación, en el que los materiales soltados por los enemigos junto con los consumibles como flechas y pociones (el inventario lo vas a tener lleno de estas cosas), podrán ser utilizados para pociones de vida ( no existe algo similar al estus y se gastan) pociones de mana, flechas y demás objetos con utilidad varia. La inclusión de este sistema esta bien, pero tener que jugarme la vida para obtener sanación, como bien ocurría en Bloodborne, no me parece una mecánica que le venga bien a este título.

 Un bello conflicto visual

En donde si que le voy a dar mi enhorabuena a Bleak Faith: Forsaken es en el apartado visual. Desde el tráiler me cautivó ese rollo futuro distópico en un mundo medieval, tecnología contra naturaleza, humanos contra máquinas, y en los escenarios del juego y en los diseños de enemigos se ve plasmado de una manera sublime. Algunos apartados dan tensión por sus colores rojos saturados y otros calma con verdes prados y tonos mas suaves, en una dicotomía bastante interesante.

El diseño sonoro, como todos los juegos souls, es algo curioso, carece de música prácticamente en todo momento, salvo en el caso de bosses y la pocas musical ambiental que se escucha tampoco es que sea muy destacable. El feedback en combate sí que es un absoluto caos: a veces un ataque conecta, pero suena que no le diste, y no se registra el golpe; a veces sí que suena que le das, pero al enemigo le da igual y te pega aun así; a veces los ataques te atraviesan sin hacerte daño cuando te da el ataque, pero sufres las consecuencias después. Todo muy raro. Esto, aunque se ha ido solucionando poco a poco con parches, sigue siendo el peor punto del juego, por las situaciones injustas que puede generar con gran facilidad.

 El Dark Souls de los controles

Otro de los aspectos que vale la pena comentar, y que si ves las reviews de Steam, notaras que  es un tema muy candente, son los controles. Así en general el mapeado de controles es un poco lio, como bien comente anteriormente es mejor en teclado y ratón, pero hay cosas raras como el marcar objetivo en el TAB, el inventario está en el bloq. mayus, cambiar de armas es pulsando la rueda del ratón, porque moviéndola es cambiar la munición del arma a distancia (este o no equipada)y si quieres craftear algo tienes que darle a la K. Todos estos menús son totalmente inaccesibles si estás en combate o cerca de enemigos, así que hay que tener cuidado por donde te mueves.

Si aun así decides que quieres jugar con mando, buena suerte, porque primero, no lo suele detectar, ni el propio Steam ni herramientas externas; por lo menos yo estuve probando por activa y por pasiva y no había manera. Segundo, la gran mayoría de las acciones no se encuentran asignadas a un botón, o por lo menos, no lo estaban; parece ser que gracias al esfuerzo de la comunidad ya se han solucionado ambos asuntos.

 Conclusiones

Terminaré sintetizando todas mis quejas y opiniones de este análisis en una sola frase «Bleak Faith: Forsaken, no estaba preparado para salir aún«. Y esto es algo que como persona que probó el jeugo por primera vez solo a tres días de su lanzamiento oficial se veía venir a la legua. El juego estaba fundamentalmente roto. Mi primera experiencia fue un muro en la cinemática inicial parpadeando por que la textura estaba mal cargada, lo cual siempre alegra.

El juego ha ido mejorando a pasos agigantados desde la primera vez que lo jugué, pero tiene un efecto de desencanto muy curioso. Mientras que me va gustando cada vez mas porque se nota que los desarrolladores han escuchado a la comunidad, siempre me acabo encontrando un bug o un error catastrófico que me tira toda la experiencia abajo, como atravesar el suelo, ser catapultado por un cadáver o tropezarme con unas escaleras y morir, no es broma, hay veces que te caes de escaleras o salientes a zonas transitables y el juego te hace instakill porque cree que has caído al vacío.

Sin duda, Bleak Faith: Forsaken debería de haberse mantenido como un early access al menos un par de meses mas, y así no tendríamos esta conversación, en lo que llevo probándolo lo han actualizado la friolera  de diez veces, ha mejorado, pero le queda trayecto. Recomendaría echarle un vistazo para ver su evolución, pero no entrar aún, tiene buenas ideas pero mucho camino que recorrer.